Tras
cortar a "hachu" un árbol
joven, preferentemente en luna menguante y ladera orientada al
norte, se
sierra transversalmente con el "tronzón",
cuando da para mas de una madreña
se "fiende" con cuñas.
Se
hace un primer desbaste a "hachu" (aponer)
rebajando la "papá" y
marcando la" boca", se insinúa la cumbrera de la" tapa" y
se da cierta forma al "picu" de la futura madreña
Con la "zuela de dos cortes,con el ancho, se comienza
a rebajar la "boca" y repasar el"calcañal" y la "tapa",
luego se retocan los "peales" y el "papu".
Con
el corte estrecho se hace el vaciado del hueco de la "boca" (petiar)
luego los bordes del "costechar" y el "calcañal". Dado
que el espesor de la madreña es mínimo, cualquier
mal golpe arruinaría el trabajo.
Se termina
definiendo los "peales" y dando a la delantera su forma definitiva,
definiendo la pieza su forma exterior.
Posteriormente
a la madreña se la fija al burro por medio de cuñas
y se le aplica el "taladru"y así la "casa" empieza a ser
una realidad, rebajando también el espesor de las paredes
y la "tapa" en medio de sonoros crujidos.
Con la "gubia " se
talla verticalmente el "calcañal" y el "costechar" por
el interior, comprobando por primera vez el madreñeru
las medidas con la "vara de medir"
Ahora
el artesano
madreñero, con la llegre, que puede ser de
varias formas, adaptándose al cometido, repasa todos los
rincones de la madreña.
El siguiente paso
es acuchillar y alisar con el "raseru" colocando un cojín
en el pecho para evitar posibles cortes, pasándole varias
veces para ver que zonas tanto de los "peales" como la "tapa" como
los "costechares" necesitan ser retocadas
Con
el "cepillo" se da un repaso final a la zona del "calcañal" y
de la "papá" tras lo cual ya se pueden comparar ambas
madreñas.
La
siguiente tarea consiste en "desbocar" la madreña
con el "cuchillu",
durante la cual la
madreña se apoya contra las piernas y se inmoviliza con la otra mano.
Primeramente
se da a la boca su forma final, y se van haciendo pequeños
retoques, tanto en los peales, calcañal y borde de la
boca.
Tras la repetición
de la operación con la segunda madreña el par ya
esta listo para "afumar"que ya no es competencia del madreñeru,
sino de su mujer.
Cuando la madreña ya
ahumada vuelve al control del madreñero, este la limpia
por la petiaura llegrandola, inmovilizándola
entre las piernas. Luego la mujer la unta con una pelleja de
tocino y el madreñero hace el dibujo (pintar o tallar)
Con la limpieza del borde
de la boca con ayuda del cuchillo y los últimos retoques
de la llegre concluye el proceso de elaboración de la madreña:
Han pasado unas dos horas y media desde que el hacha comenzara
a golpear la madera. |